Los inversores en criptomonedas deben tener cuidado con las estafas

Los inversores en criptomonedas deben tener cuidado con las estafas

Play all audios:

Loading...

GETTY IMAGES Facebook Twitter LinkedIn


Si te gusta invertir en mercados monetarios muy poco regulados y famosos por atraer a los delincuentes, entonces la criptomoneda es para ti.


Justo el pasado mes de mayo, piratas informáticos robaron $40 millones en el intercambio de criptomonedas Binance. Pero aun cuando nunca hayas tenido ningún problema con las monedas


digitales, no debería sorprenderte saber que el mundo del bitcóin, Ethereum y otras criptomonedas está plagado de fraude.


Membresía de AARP: $15 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.


Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine. Únete a AARP

En qué consiste


Una criptomoneda es una moneda electrónica —no son billetes ni monedas metálicas— que opera en forma independiente de los gobiernos y los bancos centrales, como el Banco de la Reserva


Federal. Las personas guardan las criptomonedas, como el bitcóin, en billeteras electrónicas que están protegidas con contraseña. Se puede transferir dinero de billetera a billetera, de


manera anónima, para comprar una pizza, vender un automóvil o incluso pagar un rescate, siempre que la otra parte en la transacción acepte bitcoines.


Entre algunas de esas otras partes se encuentran AT&T, Microsoft y Overstock.com, aunque hay muchas empresas que no aceptan criptomonedas.


Los bitcoines pueden comprarse y venderse en plataformas de intercambio usando dólares estadounidenses y otras monedas tradicionales. Y utilizando una computadora para resolver problemas


matemáticos cada vez más complejos, se crean nuevos bitcoines. Este proceso se denomina “minería” y requiere mucha potencia de procesamiento informático y mucha electricidad. Quienes


resuelven el problema reciben un bitcóin como recompensa.


El bitcóin y otras criptomonedas se asientan en un libro contable denominado cadena de bloques, que resulta prácticamente imposible de modificar.