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La fecha límite para presentar las declaraciones de impuestos federales —y pagar los impuestos adeudados— es el 15 de julio, y si debes una suma importante de dinero podrías estar tentado a
usar una tarjeta de crédito. De esa manera, al menos, obtendrías algunos puntos de recompensa mientras tu dinero pasa a manos del Gobierno federal. Pero la decisión es más complicada de lo
que podría parecer.
El Servicio de Impuestos Internos (IRS) ha contratado a tres compañías para procesar los pagos de impuestos federales con tarjeta de crédito. Cada una cobra una tarifa que oscila entre el
1.87 y el 1.99% para procesar el pago.
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Obviamente, si tu tarjeta de crédito ofrece un 2% de reembolso en efectivo en las compras, no vas a ganar mucho dinero. “Apenas tendrías una mínima ganancia”, dice Ted Rossman, analista de
la industria en creditcards.com. En una factura de impuestos de $10,000, obtendrías $200 en una tarjeta que ofrece un 2% de reembolso en efectivo en las compras, pero pagarías entre $187 y
$199 en cargos. La ganancia neta de $1 a $13 podría parecer que no vale la pena, aunque al menos cubrirías el cargo de procesamiento.
Sin embargo, si tienes una tarjeta de recompensas y obtienes puntos por tus compras, podrías obtener algún beneficio al usarla para pagar tus impuestos. Una vez más, debes asegurarte de que
la cantidad que pagas por gastos de procesamiento del pago de impuestos sea menor que el valor de tus puntos.
Volvamos al ejemplo de la factura impositiva de $10,000 y supongamos que tendrás un cargo de $187 por pagar la deuda federal con tarjeta. Los puntos suelen valer entre uno y dos centavos
cada uno. Si la compañía de tu tarjeta de crédito te diera 10,000 puntos por cargar una factura de impuestos de $10,000 —a un centavo por punto—, ganarías el equivalente a $100, que no es
suficiente para que valga la pena usar tu tarjeta para pagar tu factura de impuestos.