Sí. Según datos de la Administración del Seguro Social (SSA), el 89 por ciento de los trabajadores estadounidenses de entre 21 y 64 años tienen un empleo "cubierto", o sea, aportan

al Seguro Social a través de deducciones de nómina o impuestos sobre el trabajo por cuenta propia. Pero hay grupos de empleados que no están cubiertos. Estos incluyen: * Algunos empleados

estatales, del condado o municipales que están cubiertos por planes de pensiones financiados por el estado en vez del Seguro Social. * Los empleados del Gobierno de EE.UU. que fueron

contratados antes de 1984, el año en que las agencias federales comenzaron a operar bajo el Seguro Social. Los empleados federales que han trabajado desde ese tiempo reciben pensiones bajo

Unidas. (Los ciudadanos estadounidenses que trabajan en Estados Unidos para gobiernos extranjeros —por ejemplo, un ciudadano de EE.UU. que trabaje para la Embajada de Francia en Washington—

sí pagan impuestos del Seguro Social y están cubiertos). Contrario a un mito que no desaparece, los miembros del Congreso _sí_ están cubiertos por el Seguro Social. Al igual que los demás

empleados gubernamentales del país, ellos han aportado al sistema desde 1984. TEN EN CUENTA QUE * Los empleos mencionados arriba no están cubiertos por el Seguro Social, pero las personas

que ocupan los puestos pueden haber acumulado suficientes ingresos en trabajos a tiempo parcial o empleos de segunda carrera en el sector privado para poder recibir una pensión no cubierta y

los beneficios jubilatorios del Seguro Social. Sin embargo, sus pagos del Seguro Social podrían reducirse bajo un elemento de la ley del Seguro Social llamada Eliminación de Ventaja

Imprevista.