Play all audios:
3. HISTERECTOMÍA PARA LOS FIBROMAS UTERINOS Todos los años, aproximadamente 600.000 mujeres estadounidenses se someten a histerectomías, o les extirpan el útero, y los estudios realizados
demuestran que la gran mayoría de esas intervenciones son innecesarias. Una histerectomía es fundamental cuando la paciente tiene cáncer (que es el caso del 10% de esas mujeres). Sin
embargo, la mayoría de las pacientes se someten a la práctica por problemas que afectan la calidad de vida, como sangrados profusos o dolor causado por fibromas uterinos (tumores benignos en
las paredes uterinas). Las complicaciones son comunes. Un estudio realizado por la University of California, en San Francisco, halló que las mujeres que pasan por una histerectomía tienen
un 60% más de riesgo de sufrir incontinencia hacia los 60 años. Una histerectomía que incluya la extirpación de los ovarios —una ooforectomía— lleva a la paciente a una menopausia
instantánea. Estas pacientes también deben enfrentar un riesgo mayor de sufrir enfermedades cardíacas y cáncer de pulmón, señala William Parker, M.D., autor de _A Gynecologist’s Second
Opinion_ (La segunda opinión de un ginecólogo) e investigador principal de un estudio del 2009 acerca de las consecuencias a largo plazo de la histerectomía. ALTERNATIVAS A LA CIRUGÍA Si
sufre de fibromas uterinos, pregúntele a su médico acerca de otras opciones, como la embolización de las arterias uterinas, en la que las arterias que van al útero son bloqueadas, lo que
hace que los fibromas dejen de crecer. También podría considerar un procedimiento nuevo, el ultrasonido concentrado, que logra que los fibromas se achiquen a través de ondas de ultrasonido.
“Es algo sorprendente que hayamos tenido todos estos procedimientos alternativos durante tantos años y que no se hayan impuesto”, dice Parker. 4. ARTROSCOPIA DE RODILLA PARA LA
OSTEOARTRITIS En este procedimiento, un cirujano coloca una pequeña cámara en la rodilla y, luego, inserta pequeños instrumentos a través de otras incisiones para reparar el cartílago roto o
envejecido. Estudios realizados demuestran que la operación funciona bien cuando, en efecto, los pacientes tienen el tejido de los meniscos rotos, pero que no es más exitosa que otros
remedios menos invasivos para tratar la osteoartritis de rodilla. En un estudio del 2008, 178 pacientes con osteoartritis recibieron fisioterapia y terapia médica sin cirugía, o terapia más
cirugía. Después de dos años, los dos grupos presentaban los mismos resultados, e informaron menos dolor y rigidez, y más movilidad. ALTERNATIVA LA CIRUGÍA Si sufre de dolor de rodilla,
“comience con el tratamiento más inofensivo y menos invasivo, y vaya avanzando en tratamientos”, aconseja Colin Nelson, investigador sénior adjunto de la FIMDM. Esto incluye cambios en su
estilo de vida, como hacer ejercicio, y medicamentos e inyecciones de cortisona.