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Anecdóticamente, el CBD parece dar resultado para calmar el dolor. El neurocirujano Joseph Maroon, profesor de University of Pittsburgh Medical Center, dice que sus pacientes con dolor en
las articulaciones y en la espalda encuentran alivio en el CBD de venta libre. “Siempre que hay inflamación, es posible que el CBD ayude”, dice. “Hay algunos datos que indican que es útil en
la neuropatía periférica, un problema creciente para las personas que sufren de diabetes, en especial a medida que envejecen. Yo lo recomiendo junto con otros antiinflamatorios naturales,
como el aceite de pescado, la curcumina y la boswellia". Pero hay indicaciones marcadas de que "los productos de CBD que tienen cierto contenido de THC" son los más eficaces,
dice Bryan. Por ejemplo, un estudio alemán realizado en el 2019 de un fármaco con cantidades iguales de THC y CBD demostró que alivió el dolor crónico intenso. Incluso una pequeña cantidad
puede marcar una diferencia, si bien eso presenta el cuestionamiento de la eficacia del CBD de venta libre (puro), que no contiene lo que se consideran cantidades terapéuticas de THC. Los
científicos sospechan que el CBD actúa adhiriéndose a los receptores en el sistema endocannabinoide del organismo, un sistema interno de regulación que desempeña una función en el dolor, el
sueño, el estado de ánimo, la inflamación y el estrés, entre otras cosas. Igualmente, no se aproxima siquiera a ser una cura para todo. "La gente piensa que sirve para casi todo, pero
eso no puede ser cierto", observa Kent Hutchison, profesor de psicología y neurociencia en University of Colorado en Boulder. "Probablemente será bueno para algunas cosas; solo
tenemos que averiguar cuáles son. Necesitamos buenos estudios con seres humanos". Mayormente, el CBD se ha investigado para los trastornos convulsivos. En un estudio reciente, el CBD
redujo las convulsiones en niños y adultos de entre 2 y 55 años. En el 2018, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobó Epidiolex —el primer fármaco del país derivado del
CBD— para formas graves y poco frecuentes de epilepsia que no responden a otros tratamientos. El CBD no es un tratamiento para trastornos médicos graves como el cáncer, la diabetes o la
enfermedad de Alzheimer. Desde el 2015, la FDA ha enviado docenas de cartas de advertencia a las compañías de CBD que hicieron afirmaciones "flagrantes" o "infundadas",
entre ellas Curaleaf, a quien la FDA envió una carta en julio por afirmaciones sobre la salud publicadas en el sitio web de la compañía que, indica la FDA, equivalían a vender medicamentos
no aprobados. (La compañía dice que ha eliminado esas afirmaciones y apoya los esfuerzos de la FDA para hacer cumplir las reglamentaciones). LO QUE SABEMOS CÓMO TE AYUDA FUTURAS
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