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A todos nos ha pasado. Estás a punto de probar la receta que has querido cocinar durante mucho tiempo cuando ves esa línea: "Comienza picando la cebolla". Claro, la cebolla agrega
más sabor, pero también puede ser un dolor de cabeza en la cocina. "Las cebollas tienen un mecanismo de defensa contra muchas plagas y posibles herbívoros", explica Brian Quoc Le,
un científico de alimentos y consultor de la industria alimentaria. Las células de estos bulbos, dice, están separadas en diferentes compartimentos. Uno contiene una enzima, mientras que el
otro contiene un aminoácido especializado. Cuando las células se rompen con un cuchillo, replicando la mordida de un insecto, ambos se mezclan y crean un compuesto sulfuroso que llega a tus
ojos y te hace llorar. Aunque el compuesto no es peligroso, las lágrimas pueden afectar tu visión en un momento crítico, mientras manejas cuchillos y otros utensilios de cocina afilados,
dice la Dra. Natasha Herz, portavoz de la Academia Americana de Oftalmología y oftalmóloga en Family Care and Surgery en Rockville, Maryland. Esto no significa que debas dejar de picar
cebolla por completo. Pedimos a los expertos sus consejos favoritos respaldados por la ciencia para evitar que fluyan las lágrimas: 1. OPTA POR GAFAS PARA CORTAR CEBOLLA Tal vez te veas
ridículo, pero los científicos de alimentos y los chefs dicen que podrían ser tu mejor opción. Las gafas para cortar cebolla están diseñadas para aislar completamente tus ojos de los
compuestos irritantes que se liberan al picar, evitando así la reacción que provoca el flujo de lágrimas. "Una vez que superas la parte en la que te ves un poco gracioso, realmente
funcionan", dice Lisa McManus, editora ejecutiva de America's Test Kitchen Reviews. Del mismo modo, las gafas de natación deberían funcionar. Las gafas regulares y los lentes de
contacto también pueden ayudar, pero aún dejarán partes de tus ojos sin protección. De todas formas, ¿a quién le importa cómo te ves en la cocina? 2. CREA MOVIMIENTO DE AIRE Crear un poco de
flujo de aire puede ayudar, dice Abbey Thiel, una científica de alimentos que también publica videos en YouTube. Abrir la ventana para crear una corriente de aire puede ayudar, aunque no
puedes predecir la dirección en la que va a soplar el viento. Encender un ventilador para intentar mantener los compuestos lejos de tus ojos podría evitar las lágrimas, pero puede que no
elimine todos los compuestos irritantes. Tener un ventilador en la cocina también puede ser complicado. 3. ENFRÍA TUS CEBOLLAS