La nueva ley de violencia machista se aprobará ya el próximo periodo

La nueva ley de violencia machista se aprobará ya el próximo periodo

Play all audios:

Loading...

El proyecto de ley de atención integral a las víctimas de violencia de género en Castilla y León entra el el debate de las enmiendas presentadas por los grupos, pero su complejidad y el


elevado número de propuestas recibidas lleva su aprobación, para la que se busca el máximo consenso, al próximo periodo de sesiones. La Mesa de la Comisión de Familia e Igualdad de


Oportunidades, que preside la procuradora del PP Inmaculada Ranedo, calificó este viernes las enmiendas, que son un montante de 279, todas ellas siguen adelante y solo Soria Ya retiró una.


Así, 103 corresponden al Grupo Socialista, siete al Popular, 37 a UPL, 33 a Soria Ya, 57 a Pablo Fernández y 42 a Francisco Igea. Ranedo explicó, en declaraciones a Ical, que «siempre es


importante aportar» en referencia a las siete que ha registrado su grupo al texto remitido por la Junta de Castilla y León el pasado 9 de enero, si bien aclaró que son correcciones o


matices, nada sustantivo al considerar que es «un buen» proyecto. No obstante, reconoció que es bueno que de entrada exista una predisposición de los grupos al acuerdo, aunque afirmó que en


este momento no existe una base de consenso básico que tiene que surgir del debate de las enmiendas entre los grupos. Nuevas víctimas Tanto Junta como Grupo Socialista abogan por convertir a


Castilla y León en «vanguardia» y «referencia» en la lucha contra la violencia de género en España, tanto en la extensión de este concepto a nuevas víctimas, como en contar con más medios y


en blindar los centros de protección. En el proyecto de la Junta se tipifican nuevas formas de agresión como la digital y tecnológica, la vicaria o la de segundo orden y se protege a más


víctimas, como niñas y adolescentes en situación de violencia de género, menores que se encuentren bajo su patria potestad o guarda y custodia, familiares por consanguinidad o afinidad hasta


el segundo grado inclusive que convivan con la víctima y las mujeres castellanas y leonesas retornadas que hayan sido víctimas de esta violencia en otro país.