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La Policía Local de Albacete intervino en la madrugada del pasado miércoles a ayer jueves tras lo ocurrido con un perro que perturbaba el descanso de los vecinos de un inmueble al
encontrarse encerrado en el balcón de un piso cercano al Recinto Ferial de Albacete y no parar de ladrar.
Así lo han indicado fuentes oficiales, que han añadido que los hechos ocurrieron a las 00.34 horas y estuvieron ubicados en un edificio de la calle La Roda, que es el tramo de la
Circunvalación que va desde la rotonda donde antiguamente estaba Grúas Lozano hasta la Tamos.
La llamada que activó a la Policía Local de Albacete indicó que en dicho edificio había un perro encerrado en un balcón y que este no paraba de ladrar, comportamiento con el que perturbaba
el descanso de los vecinos e imposibilitaba poder conciliar el sueño.
Desplazada una patrulla hasta el lugar de los hechos, los agentes de la Policía Local de Albacete no pudieron localizar en primera instancia al dueño de la mascota al llamar varias veces a
la vivienda y no siendo abierta la puerta.
Así pues y debido a tales hechos, se dejó nota de servicio y al día siguiente, jueves 15 de septiembre, una patrulla volvió a pasar por el edificio para sancionar al dueño del perro por el
incumplimiento de la Ordenanza Cívica Municipal.
La Ordenanza Cívica de Albacete recoge que “no está permitido como norma general perturbar el descanso y la tranquilidad de los vecinos, en especial en el período comprendido entre las 22 y
8 horas, mediante el funcionamiento de equipos tales como: aparatos y reproductores musicales, televisiones, radios, aparatos de climatización, persianas, transformadores, equipos de obras,
cualquier tipo de vehículo, herramientas de obras u otros aparatos sonoros así como las conductas o comportamientos tales como cantos, gritos o cualquier otro acto molesto incluido los
ruidos de animales especialmente los ladridos sin que en ningún caso puedan transmitirse ruidos que superen los valores legales establecidos”.