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1. La trayectoria impoluta de Diego Martínez sin sufrir remontadas al frente del Granada se quedó en su partido 104, justo en la ciudad que ... le vio nacer, Vigo. 54 veces había marcado su
equipo antes que su contrincante y sólo había cedido ocho empates en el cómputo global entre Segunda división, la temporada pasada ya en Primera y la actual. De ese calificativo bien ganado
de irremontable ha pasado al más reciente de resucitador de conjuntos en aparentes horas bajas, tras estas dos últimas derrotas en Liga ante adversarios que empezaban la jornada como
colistas: primero el Valladolid y este domingo el Celta. Ambos han reaccionado tras el parón de selecciones. Uno de ellos, el cuadro celeste, de la mano de un nuevo entrenador, Eduardo
Coudet, que ha traído aire fresco al vestuario. Nadie regala nada en la élite. 2. Pero hay un récord del conjunto rojiblanco que, si termina cayendo, aún estará vigente como poco unas
cuantas semanas más, puede que meses. Es el de número de partidos oficiales disputados. Suma 17 en el ejercicio vigente, entre los diez de Liga (tiene un encuentro aplazado), las tres
previas europeas y las cuatro jornadas de UEL celebradas. Todo ello sin agregar aún la Copa del Rey, que arranca el 16 de este nuevo mes. Si sella el pase en Europa, más faena en febrero. 3
.Real Sociedad y Villarreal, con quince duelos, son los que le siguen en este listado agotador. Estos dos últimos manejan presupuestos mayores y plantillas más profundas. Son clubes
habituados a disputar tres torneos y a tener a muchos canteranos en dinámica del primer equipo. En el Granada, la presencia de los del filial es anecdótica, más allá de la aparición aislada
del defensa Pepe, la inclusión de uno del Recreativo como tercer portero en las convocatorias y la coyuntura de San Sebastián por la cuarentena que contribuyó a sumar 17 bajas entre los
'mayores'. 4. Más allá de circunstancias y de calendarios, pues el Celta no tuvo entretenimiento alguno entre semana, se cierra un noviembre para olvidar en el campeonato nacional
para los rojiblancos, con tres derrotas y un empate frente al Levante en Los Cármenes, similar al mismo periplo de la campaña anterior, cuando entre el 31 de octubre y el 1 de diciembre en
2019 perdieron cuatro encuentros y firmaron las tablas en uno. El análisis tiene trampa porque en el mismo plazo también ha habido dos victorias que resaltar frente al Omonia, tanto en
Nicosia como en el feudo nazarí. Este desdoblamiento entre competiciones contribuye a explicar el problema de fatiga acumulada que existe. 5. Se da otro paralelismo con aquel tramo liguero
del 19. Diego Martínez estrenó entonces la zaga de tres centrales en el inicio de un choque, algo que solo había empleado en algunos cierres. Fue en Getafe, con un resultado aciago, el mismo
3-1 que se dio este domingo en Balaídos. Por aquel entonces, en el Coliseum faltó coordinación para afianzar el sistema. También actuaron varios jugadores de reparto que no tuvieron su
noche y afectaron al rendimiento colectivo, ese día flojo en general. Con el tiempo, ese esquema sí caló y dio triunfos sonados como en El Sadar o en el broche del campeonato, en la venganza
con el Athletic por la eliminación copera. 6. Sin embargo, esta temporada se había afianzando un 4-3-3 muy armónico, con peso para los centrocampistas, demarcación fortalecida con la
llegada de Luis Milla. La lesión de Montoro (Azeez lleva semanas convaleciente a su vez), el cansancio de Gonalons y un estado precario de Eteki aunque estaba en el banquillo (apareció en el
parte médico esta semana), abocaron al entrenador a un esquema de urgencia con más centrales que no sirvió para protegerse mejor. 7. Como se cansan de repetir los técnicos, el dibujo es tan
solo una distribución aproximada sobre el campo, pero no es la clave fundamental del plan de partido. La solidez defensiva se logra con atención y ayudas, mientras que la intensidad en la
ejecución depende también de la frescura de piernas y de la limpieza mental. Este Granada apenas tiene reposo y eso mella a un grupo poco habituado a semejantes esfuerzos continuados. Han
ido cayendo elementos por el camino, pues a día de hoy hay seis futbolistas en el dique seco (cinco más Neyder Lozano, no inscrito). 8. Lo que ha distinguido a este Granada, lo que le ha
colado entre la aristocracia del fútbol español pese a su modestia, siempre ha sido su extraordinaria capacidad para aproximarse a la mejor versión de la mayoría de sus futbolistas gracias a
una gran preparación y, sobre todo, la importancia que siempre le ha otorgado a dejar su puerta a cero. Sólo en Chipre lo logró y así asentó sus dos últimos triunfos en Liga con Sevilla y
Getafe en octubre. 9. Cerrar el boquete atrás es fundamental para recuperar la senda pasada. El paso adelante de jugadores que han tenido menos minutos, también. La vuelta de Quini es un
desahogo en ambos laterales, forzado Neva a una titularidad permanente hasta ahora y fuera de onda Foulquier de un tiempo a esta parte, demasiado distraído. En este 'neofútbol'
pandémico es necesario obtener «todo de todos», como repite Diego Martínez. Las rotaciones se convierten en traslaciones. 10. El domingo se le pone delante el tercer colista consecutivo. En
este caso, el Huesca, que no ha ganado ni un enfrentamiento en el ejercicio. Conviene evitar confianzas excesivas porque es un cuadro aguerrido y de propuesta alegre, que aún no ha ganado
por detalles. Los rojiblancos quieren dejar de ser terapéuticos para los enemigos, pero antes han de solucionar la papeleta el jueves.