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Ana María Vacas Martínez-Blasco CARAVACA DE LA CRUZ Lunes, 13 de mayo 2024, 10:09 Comenta Compartir Joaquín, prácticamente desde su infancia, ha estado inmerso en un entorno rural en la
región de Murcia, sobre todo en el noroeste ya que él es nacido en Bullas (1996). Creció rodeado de naturaleza, ello le ha enseñado a apreciar la belleza de lo que le rodea aportándole una
fuente inagotable de inspiración para realizar sus obras, es fotógrafo de paisajes naturales, retratos y mundo rural. Desde niño solía pasar los veranos en el campo en la casa de sus
abuelos, disfrutando del espacio que recorría, aventurando, experimentando en la vida como niño y como futuro espectador fotográfico. Esa riqueza vivida permanece en su mirada y, por
supuesto, es reflejo en sus fotografías. La fotografía surge de un día para otro en su vida siendo un adolescente. Un buen amigo le dejó una cámara de fotos digital de las iniciales y estuvo
toda una tarde disparando con ella y quedó enganchado al momento. Posteriormente tuvo una maquina réflex y su última adquisición fue una Sony con la cual ya inició sus inmersiones en el
vídeo. La fotografía para él no es sólo una forma de arte, sino también una manera de conectar más con la naturaleza y compartir esta conexión contando historias a través de ella,
transmitiendo emociones. Ha dedicado años a profundizar en la fotografía a través de la práctica constante y el estudio autodidacta, a través de libros, tutoriales en línea y la mentoría de
otros fotógrafos, así como asistencia a talleres y conferencias de fotografía para continuar su aprendizaje y perfeccionamiento. Ha sido miembro de la asociación fotográfica Bullas. Cuando
sale con la cámara siempre lleva una idea en la cabeza, pero luego esta se transforma como consecuencia de lo que observa, desencadenante de este estímulo que le hace decidir el momento, el
instante del disparo. En alguna ocasión después de aventurarse, andando tres días por la montaña y percibiendo. Joaquín es Agente medioambiental, por ello le resulta muy fácil encontrar
escenarios en su propio trabajo, ya que suele llevar la cámara por estos instantes especiales. Trabaja con diversas temáticas que siempre han tenido prioridad y espacio en su mente. Cuando
la fotografía es dirigida a la naturaleza y el paisaje en general, no sólo nos conecta con la naturaleza, sino que, en cierta forma, es una buena herramienta para crear conciencia sobre
paisajes protegidos a nivel de flora y fauna, por ello también ha colaborado con varias asociaciones para documentar fotográficamente proyectos de conservación y educación ambiental en
colaboración con el Ayuntamiento de Bullas. En el caso del mundo rural y la despoblación, como el mismo nos explica «siempre me ha llamado la atención ese sentimiento encontrado que surge al
contemplar la vida en el mundo rural, una mezcla de nostalgia y admiración, una sensación entre conexión perdida y encontrada al mismo tiempo». Con este tipo de fotografías busca hacer un
tributo a esta profunda relación entre ser humano y el entorno que le rodea, y como a través de los años hemos influido en el cambio ambiental moldeando paisajes, no siempre para bien. Un
ejemplo de ello es el documental «Los Odres» en el que trabajó como director de fotografía, junto a dos compañeros, Francisco Martínez Abellán y Adrián Guirado, con una cámara y una
grabadora, y muy pocos recursos consiguieron realizar el trabajo.Tiene miedo de que desaparezca la sabiduría con estas últimas generaciones de mayores, que no puedan transmitir a tiempo todo
lo que saben y la importancia de ello para toda la sociedad, por eso su interés por mostrarlo. Cuando su enfoque está dirigido al retrato, se ha centrado en fotografiar a personas que viven
en entornos rurales. Le gusta pensar que cada retrato es una invitación a reflexionar sobre una realidad que cambia rápidamente, y además un acto de reconocimiento y gratitud hacia aquellas
personas que han mantenido vivas las raíces de nuestra historia y cultura. Una buena fotografía para Joaquín debe tener unas características que imprime el momento, cuando la miras tiene
que trasmitir, debe constar de una parte pensada, revelar un mensaje o una historia que contar, una parte emocional y sobre todo hay que sentirla en primera persona para poder compartirla
después con los demás. La fotografía siempre está ligada al estado anímico de la persona que la realiza y esto se refleja de alguna manera. En su caso de lo que se ha dado cuenta siempre es
que en momentos que ha estado peor anímicamente es cuando más conexión ha tenido con la fotografía y más ha necesitado de ella. Todos necesitamos hacer un cambio de mentalidad para adecuar
la fotografía a nuestros tiempos y buscar distintas formas de valorar contenidos, sobre todo no quedarnos en la manera clásica de entender el concepto. En las obras de Joaquín puedo
encontrar la belleza del entorno mirada con la sutileza artística y emocional. Se sobreentiende en sus obras la conexión espiritual y la integración como ser humano que tiene con la
naturaleza y como se siente parte de ella. Sus fotos de macro, sus distorsiones, sus paisajes inmensos nos llevan a disfrutad a ojos llenos. Adora la vida pausada y así, consecuente con sus
convicciones, vive en un pueblo de un censo muy pequeño siendo coherente con lo que le gusta y respeta, estando cerca de todo aquello que le interesa. Bienvenido, Joaquín, a la VI Edición de
Icon Talents, deseando ver tu trabajo. Comenta Reporta un error