Piano a la luz de las velas | la verdad

Piano a la luz de las velas | la verdad

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Conciertos que producen «calma» en los espectadores. Acordes de piano que se escuchan mejor en la penumbra de un escenario iluminado con la leve luz ... de las velas. Espacios íntimos que


permiten a los asistentes pasar un rato «relajado y vivir el momento de una manera más profunda». Una sensación de intimismo y relajación fue la que experimentaron los espectadores que el


pasado martes acudieron al concierto programado dentro del ciclo 'Música en Vela', un espectáculo a cargo de grupos de cámara del conservatorio de música de Cartagena. Un montaje


que llenó el escenario del centro Cultural Ramón Alonso Luzzy de «magia», a juzgar por los comentarios que vertieron los asistentes al terminar el concierto. Los protagonistas de la noche


fueron cinco jóvenes promesas que se han formado en el conservatorio de Cartagena y que reconocieron que la experiencia había resultado para todos ellos «de lo más grata y enriquecedora».


Santiago Ordóñez, Victoria Buide, Shi Gou Nina, Antonio Jiménez y Oma Alonso se subieron al escenario, cuajado de velas, para tocar al piano piezas de autores consagrados y ofrecer una


experiencia única a los asistentes. La 'Candlelights Piano', un concierto que se celebra a la luz de las velas, reunió en el Luzzy a un gran de número de personas amantes de la


música. Cari Salinas, una de las asistentes, comentaba poco antes de comenzar el espectáculo, «la tranquilidad que me transmite la música de piano, y mucho más el ver el escenario lleno de


velas». Como ella opinaba Natalia Grau, responsable cultural del Museo Regional de Arte Moderno de Cartagena y una gran aficionada a la música. «Me parece una maravilla que con actividades


como esta se esté promocionando el talento de gente tan joven», comentaba con amigos como Teresa Olivares, Manuel Arroyo, Mari Carmen Palacios y Ángel Rodríguez. La primera en llegar al


teatro fue la joven Victoria Buide, acompañada de su hermano Álvaro y sus padres Cari Solano y Juan Carlos Buide. Ella fue una de las participantes en la gala y reconocía que «mostrarle al


público como hemos trabajado en el conservatorio es algo emocionante». Sus padres comentaban el «tesón, el trabajo y el esfuerzo que supone una carrera que es vocacional, como la de músico.


Nuestra hija lleva tocando el piano desde los seis años y tiene muy claro que quiere dedicarse a esto porque le entusiasma», señalaron. Otro de los protagonistas del espectáculo, Antonio


Jiménez, se mostraba «muy emocionado» por vivir «un día muy importante para mí porque es la primera vez que toco en público una pieza de Beethoven». Los jóvenes interpretaron de una manera


brillante y magistral obras de Bach, Haydn, Turina, Albéniz, Chopin y Granados. Vestidos de negro impoluto, con el escenario iluminado solo por las velas, el concierto resultó «muy bonito,


relajante y entrañable», según explicaron asistentes como Elena Gorreto y Marilén Gomariz. «Es de agradecer que se organicen espectáculos de esta categoría en Cartagena, ha sido precioso»,


comentaban al terminar el evento Teresa Cabezas, José Barceló, Ascensión Martínez, Maricruz Esquinas, Antonio Jiménez, Rubén Abajo, Lesly Pérez y Begoña Álamo. El profesor de piano de los


jóvenes músicos, Francisco Martínez, explicaba que las audiciones externas, aquellas que se celebran fuera del conservatorio, son siempre «buenas para que los alumnos puedan demostrar su


talento». A su juicio, los artistas noveles que participan en este proyecto son «los más destacados. Panistas muy trabajadores que ahora van a hacer las pruebas para entrar en el


conservatorio superior de Murcia porque quieren dedicarse a ello». La 'Candlelights Piano' se ha celebrado en otras ocasiones con un gran éxito por parte del público ya que, según


explicó el profesor, «las velas le dan al espectáculo un significado estético y una belleza fuera de lo común». Toda una experiencia para los sentidos de los asistentes que salían muy


satisfechos tras escuchar un espectáculo que calificaron de «cálido e intimista».