Los mejores superalimentos para la salud del cerebro

Los mejores superalimentos para la salud del cerebro

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“En los estudios se ha analizado esta asociación en poblaciones de edad avanzada. La nueva aportación aquí es que, ya en edades más tempranas, si tienes una dieta que contenga ácidos grasos


omega-3, ya estás protegiendo tu cerebro de la mayoría de los indicadores de envejecimiento cerebral que vemos en la mediana edad”, dijo Claudia Satizabal, autora principal del estudio y


profesora adjunta de Ciencias de la Salud de la Población en el Glenn Biggs Institute for Alzheimer’s and Neurodegenerative Diseases de UT Health San Antonio, en un boletín informativo sobre


el estudio. Los pescados grasos de agua fría, como el salmón, la caballa, el atún, el arenque y las sardinas, son estupendas fuentes de omega-3, según los Institutos Nacionales de la Salud.


¿No comes pescado? Puedes encontrar ácidos grasos omega-3 en las nueces, las algas, y las semillas de lino y chía, dice Naidoo. Además, el pescado puede ser una buena fuente de vitamina


B12, la cual desempeña varias funciones importantes en el cerebro. La vitamina B12 ayuda a mantener la buena salud de las células del cerebro, las células nerviosas y los glóbulos


sanguíneos, según un informe del Consejo Mundial sobre la Salud Cerebral (GCBH, en inglés) de AARP. Asimismo, favorece la descomposición de la homocisteína, señala Naidoo, una proteína que,


en cantidades elevadas, puede aumentar el riesgo de demencia, enfermedad cardíaca y accidentes cerebrovasculares. Puedes encontrar vitamina B12 en las almejas, el atún y el salmón. Los


huevos y la levadura nutricional fortificada también son magníficas fuentes de esta vitamina. Los adultos mayores tienen un mayor riesgo de padecer deficiencia de vitamina B12; un análisis


rutinario de sangre en el consultorio del médico puede indicar si tus niveles están bajos. See more Seguro offers > BAYAS Nunca subestimes el poder de las bayas: estas diminutas frutas


son muy potentes. Los investigadores han relacionado el consumo de bayas con un menor riesgo de diabetes tipo 2 y de infarto. Y un conjunto de estudios sugiere que también contribuyen a la


protección del cerebro.  ¿QUÉ CONTIENE LA DIETA MIND? La dieta MIND fomenta el consumo de 10 grupos de alimentos saludables: * verduras de hoja verde: por lo menos seis porciones a la semana


* otras verduras: por lo menos una porción al día * bayas: por lo menos dos porciones a la semana * cereales integrales: por lo menos tres porciones al día * pescado: una porción a la


semana * aves: dos porciones a la semana * frijoles: tres porciones a la semana * nueces: cinco porciones a la semana * vino: una copa al día * aceite de oliva La dieta MIND limita las


porciones de carne roja, dulces, queso, mantequilla o margarina y comida rápida o frita. _Fuente: Instituto Nacional sobre el Envejecimiento (National Institute on Aging)_ De hecho, las


bayas son la única fruta recomendada específicamente en la dieta MIND (en inglés), diseñada por investigadores de la Universidad Rush para estudiar el impacto de los alimentos en el cerebro.


Es una mezcla de la popular dieta mediterránea y de la dieta DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension), que reduce la presión arterial. En un estudio publicado en la revista 


_Alzheimer's & Dementia_ (en inglés) se descubrió que las personas que seguían la dieta MIND, que exige dos porciones de media taza de bayas a la semana, mantenían mejores


habilidades de pensamiento y de memoria. En otro estudio (en inglés) se descubrió que los adultos que se alimentaban siguiendo una dieta MIND estricta tenían una tasa de enfermedad de


Alzheimer un 53% menor que los que se apartaron de la dieta. “Añadir un puñado de bayas a la dieta cada día es uno de los primeros y más fáciles cambios que les recomiendo a quienes buscan


mejorar su salud cerebral”, dice Naidoo, que señala que las bayas también pueden ayudar a controlar los síntomas de la ansiedad. Además de estar repletas de antioxidantes, que pueden ayudar


a prevenir o retrasar el daño celular, la fibra de las bayas “también ayuda a cuidar el intestino, ya que favorece un microbioma saludable, una reducción de la inflamación y un buen estado


de ánimo”, añade Naidoo.