María Ramírez Sábado, 24 de mayo 2025, 20:04 | Actualizado 21:29h. Comenta Compartir Murcia atesora rincones que destacan por su singularidad. ¿Quién habría imaginado que el Ratoncito Pérez

se escondería en el centro de la ciudad o que albergaría la piscina voladiza más grande de Europa? Son estos detalles, junto a su historia, arquitectura y gastronomía, los que dotan a la

capital de la Región de un encanto que sorprende tanto a vecinos como a visitantes. En ocasiones, son los propios residentes los que se encargan de transformar un lugar común en un verdadero

tesoro. Un claro ejemplo de ello son las calles, que no siempre destacan por los comercios que albergan o el tráfico que generan, sino por el ingenio de los ciudadanos que viven en ella. Es

calle Mayorazgos captura los recuerdos más dulces de la infancia. Una vecina se ha encargado de decorar toda la vía con muñecos y peluches. Es precisamente este motivo el que ha llevado a

algunos a considerarla la «más curiosa» de Murcia. Así la describe Míriam Alegría, una influencer y fotógrafa murciana que ha compartido en TikTok (@miriamalegriatips) el hallazgo. «Está

llena de peculiaridades», expresa mientras hace un repaso de todas las figuras que ha encontrado. Los hay de todas las formas, tamaños y texturas: una serpiente gigante se enrosca en la rama

de un árbol, una cigüeña descansa sobre una maceta y un búho parece quedar atrapado entre las hojas de una planta. El escenario también se extiende a la fachada de una de las viviendas,

donde hay otro gran repertorio entre las rejas de las ventanas y junto a la puerta de la entrada. En los comentarios del vídeo, los residentes atribuyen esta singular iniciativa a Conchi.

«Lo cuida muchísimo, es maravillosa», asegura una usuaria. Hay otra que indica que en Navidad la colección se amplía todavía más. Sin duda, esta vía se ha convertido en un rincón especial

que continúa sorprendiendo y alegrando a todos los que pasan por allí. Comenta Reporta un error